La Asociación de Amigos de El Cardoso de la Sierra y su Municipio, (Peñalba de la Sierra, Bocigano de la Sierra, Colmenar de la Sierra, Cabida y Corralejo), nació el 25 de octubre de 1978, gracias a la iniciativa y el tesón de un grupo de geniales emprendedores que creyeron que el asociacionismo era la mejor manera de trabajar juntos, poner ideas en común y conseguir un proyecto social aglutinador que dinamizara el triste futuro que se perfilaba en estos pueblos serranos, victimas de una decadencia que aceleraba la emigración y amenazaba su desaparición.
El aire de libertad y de ilusión que corría por la España postfranquista no era ajeno al resurgimiento de muchas asociaciones de amigos, vecinos, con el ánimo de conseguir metas sociales y colectivas que propiciaran mayor desarrollo económico y prosperidad.
La asociación fue inscrita en el Registro Provincial de Asociaciones con el número 110, de acuerdo a la ley de 24 de diciembre de 1964. El Gobierno Civil de Guadalajara visó sus Estatutos el 25 de octubre de 1978. El Secretario General del Gobierno Civil de Guadalajara sello los Libros de Actas y de Socios El 14 de Noviembre de 1978.
La primera Junta General Extraordinaria de la Asociación, se celebro el día 2 de diciembre de 1978, en el local de la Asociación de Vecinos de Prosperidad, calle Pérez Ayuso numero 11. (Madrid). Las Asambleas se convocaron en este local .hasta 1980.
Quedo constituida la Junta Directiva siguiente: Presidente: Bernabé Rodríguez Fonseca. Vicepresidente: Bonifacio Arribas. Secretario: Ramón Zabalza, Tesorero: José Dolado López. Vocal por El Cardoso: Elías Martín Rodríguez, Vocal por Peñalba: Isaías Serrano Rodríguez. Vocal de Juventud: Juan Vicioso Sanz. y. Vocal por Bocigano: Juan Rodríguez Díaz.
Bernabé Rodríguez fue el motor de este proceso, junto con Ramón Zabalza, José Dolado y Bonifacio Arribas, un cuarteto de campeones que lucharon contra viento y marea por hacer realidad el proyecto. Bien es verdad, que muchos de nuestros padres, hermanos, amigos y convecinos, apoyaron con entusiasmo esta idea desde el principio y con todas sus consecuencias, sin regatear esfuerzos, ni físicos ni monetarios para revitalizar su patria chica, enfrentándose en numerosas ocasiones a la incomprensión de algunos vecinos del pueblo/
Vaya por delante nuestro reconocimiento y gratitud a los socios fundadores.
Desde el principio, los asociados tuvieron un objetivo claro: conseguir un terreno para construir el edificio de la sede social. Y tras mucho esfuerzo, lo consiguieron el 7 de el marzo de 1979, cuando el Ayuntamiento de El Cardoso de la Sierra, y su Alcalde Eugenio Heras, firmo, a petición de la Junta directiva, la autorización para la construcción de un edificio destinado a sede de la Sociedad de Amigos con fines recreativos y culturales, en un solar propiedad del Ayuntamiento, bajo la condición única de que en el caso de que deje de funcionar la Sociedad de Amigos de El Cardoso y su Municipio, tanto el solar como el edificio que haya podido realizarse, revertirá al Ayuntamiento.
Tras la concesión del terreno, el 15 de septiembre de 1979, se redacta el manifiesto para la solicitud de creación de la Asociación como Centro Cultural, dirigido al Subdirector General de Entidades y Convenios Culturales de la Secretaria del Ministerio de Cultura Español, con objeto de su inscripción en el registro de Centros Culturales.
Este hecho se materializa en la Asamblea General, de 21 de septiembre de 1979, en la que se nombra la Junta Rectora del Centro Cultural. Presidente Bernabé Rodríguez Fonseca, Vicepresidente Bonifacio Arribas Rodríguez, Tesorero. José Dolado López y Secretario Ramón Zabalza. Además se nombraron las siguientes Vocalias: Cultura: José Maria Fontana, Caza y Pesca: Silverio Vicente. Deportes: Felipe Sanz. Biblioteca: Antonio Martín, Juventud: Víctor Rodríguez y Tercera edad: Marcelino Alcol.
Desde 1978 a 1982, los Asociados invirtieron su tiempo y su dinero en la construcción del Local Social, un lugar de encuentro donde poder desarrollar actividades recreativas, asociativas y culturales que fomentaran la hermandad entre los pueblos del Municipio.
La construcción del edificio fue posible gracias a la aportación de trabajo gratuito y donaciones de todos los socios, que trabajaron sin descanso hasta los fines de semana, sin mas aportaciones económicas de Organismos oficiales, que la ayuda del IRIDA por un total de 250.000 pesetas, en los años 1979 y 1982.La primera fase de la construcción de la sede social, según estadillo económico de 1980, especifica los trabajos de explanación, excavación para cimientos, cimentación y estructura metálica del edificio, cubierta de placas onduladas de fibrocemento y cerramiento exterior del edificio, contó con un presupuesto de 1.600.000,- pesetas.
Como ilustración de este periodo, resulta revelador leer el poema que escribió Bonifacio Arribas, titulado: “Como se hizo este Centro Cultural”, un retrato realista de este periodo.
La Asociación realizo gestiones para recuperar el autobús de transporte público a Madrid que se había perdido por el descenso e la población, lo mismo que las escuelas y los servicios básicos sanitarios.
El día 24 de junio de 1982, tuvo lugar la inauguración del Centro Social de la Asociación. Presidio el acto D. José Antonio Suárez de Puga, Director Provincial de Cultura, acompañado por el Jefe Provincial del IRIDA, D. Ernesto Calmarza.
La prensa local y provincial de Guadalajara se hizo eco de este acto, resaltando la función de la Asociación como dinamizadora de la comarca,
Los primeros Estatutos marcaron claros objetivos en pro de la conservación del patrimonio natural, asesoramiento legal, fomentar el auge turístico y colaborar en todas las campañas que contribuyan al desarrollo social, económico y cultural del Municipio.
Hasta aquí nuestro origen, un ejemplo para futuras generaciones que tenemos el deber de preservar y de mejorar entre todos, es el mejor homenaje que podemos brindar a los fundadores. Ellos nos trazaron el camino y nosotros tenemos la responsabilidad de continuar la tarea que con mucho entusiasmo y pocos medios, emprendieron siendo un ejemplo para nuestros hijos.
Es necesario poner en valor lo que la Asociación significa y lo que nos brinda como lugar de comunicación y de encuentro, no solo de los socios, sino también para los vecinos y visitantes de la comarca. Además, es el centro de reunión de otras asociaciones y colectivos del pueblo, donde todo el mundo es bienvenido, sin pedir el carné.
Por la Asociación han pasado numerosos presidentes que, con diferente suerte, han intentado mantener vivo el espíritu asociativo. No ha sido un camino de rosas, ni ha estado exento de dificultades. A etapas dinámicas han sucedido otras más decadentes, parejas al envejecimiento del edificio. Lo mas positivo es que el proyecto ha sobrevivido y que no se ha puesto fin a un sueño, que como algunos conocen, apunto estuvo de suceder. La Sociedad de Amigos cuenta con un gran potencial humano, dos centenares de fieles asociados, y con el transcurso del tiempo se ha convertido en un referente social de la Sierra.
Sin pecar de optimismo, reconocemos carencias y sabemos que nos queda mucho camino por recorrer y, por supuesto, que mejorar. Si volvemos la vista atrás, al comienzo de los anos 2000, muchos de nosotros pensábamos que no íbamos a ser capaces de sacar la
Asociación adelante. Las discusiones se sucedían en las Asambleas, sin conseguir llegar a ningún acuerdo y sin contar con presupuesto para la reforma que el edificio necesitaba, sin demora.
Nos gustaría mejorar la oferta cultural, pero siempre hemos tenido que enfrentarnos al dique del presupuesto. Sin ayudas, ni subvenciones, las cuotas de los socios no permiten muchas alegrías, aparte que la reforma del edificio social ha sido una prioridad necesaria, a la que hemos dedicado todo nuestro esfuerzo durante varios años.
Hemos cumplido un objetivo y ahora estamos en mejores condiciones para afrontar nuevas actividades. Era meridiano que el edificio social necesitaba una renovación urgente y poco a poco hemos conseguido mejorarlo en todos sus aspectos: arquitectónicos con la renovación del tejado, aislamiento térmico, renovación de las viejas instalaciones, puertas, mobiliario y equipamiento de la biblioteca, lo cual nos permite disponer de un espacio útil para marcarnos nuevos retos.
Contamos con nuevos Estatutos que fue necesario adaptarlos a la nueva Ley Orgánica 1-2002 de 22 de Marzo, reguladora del Derecho de Asociación.
Queda mucha tarea por hacer, todo es mejorable, nos esperan nuevas metas y un futuro por delante. para hacer lo que los socios nos propongamos, teniendo en cuenta que no podemos abandonar el legado que nos han dejado nuestros padres.
El pesimismo no forma parte de nuestro programa. Es fundamental mantener la sede abierta y viva, facilitar el encuentro con las personas, con los Amigos, fomentar la colaboración de mayores y pequeños y dar cabida a las expectativas de los socios. Nuestro mayor potencial son los asociados, la gente que colabora y aporta día a día su granito de arena, sus felicitaciones y sus críticas.
Cristina Vicioso Sanz
Secretaria de la:
ASOCIACIÓN DE AMIGOS DE EL CARDOSO DE LA SIERRA Y SU MUNICIPIO.